Ashtanga Yoga
Ashtanga Yoga es el estilo de yoga que comparto y practico. El linaje sigue vivo desde hace más de cinco mil años, pasando por una línea de maestros y gurús; llegó a miles de practicantes mediante la vida de Sri K. Pattabhi Jois. Ahora el linaje continúa con su hijo Manju Pattabhi Jois, su hija Saraswati, su nieto R. Sharath Jois; y con cada maestro y practicante de Ashtanga.
La práctica de Ashtanga Vinyasa Yoga se caracteriza por ser tradicional e introspectiva. Vinyasa, significa respiración sincronizada con movimiento.
El fluir entre cada postura es la parte integral de la práctica.
En Ashtanga la respiración está siempre sincronizada con el movimiento. Como resultado abrimos nuestro corazón y aclaramos nuestra mente.
El Método
Tristana
Consiste en una respiración correcta (Ujjayi); posturas de yoga/asanas (con el uso correcto de los bandhas); con el punto de enfoque preciso (drishti). Este es un método y un estado. Los practicantes desarrollan un control de los sentidos, una profunda consciencia de ellos mismos y de sus sensaciones internas, emociones y pensamientos. Manteniendo esta disciplina con constancia y devoción, los practicantes desarrollan la estabilidad de la mente y el cuerpo.
Respiración
Ashtanga Yoga es una práctica donde lo más importante es la respiración. La respiración es la clave donde reina la tranquilidad y el poder. Con ella podemos regular y controlar nuestro sistema nervioso. La respiración es lo que conecta mente y cuerpo; el portal entre la meditación y el asana (postura) y el primer paso en el camino a una vida más espiritual y feliz. Es el acto más vital y fundamental que sostiene nuestra esencia divina.
En Ashtanga Yoga el movimiento está siempre en sincronía con la respiración. Cuando la sincronía del movimiento y la respiración es parte integral de la práctica de yoga, y los tres bandhas (cerraduras de energía) del cuerpo (Moolabandha, Udiyanabandha y Jalandarabandha) se aplican, se genera un calor interno purificador. Las toxinas son desechadas y hormonas y minerales vitales fluyen por el torrente sanguíneo; y el sistema nervioso se purifica. El resultado es un cuerpo ligero y fuerte.
La forma de aprender debe ser con un profesor entrenado de manera tradicional para asegurar la seguridad y el camino saludable para tu cuerpo y mente, en la ciencia del Método de estilo Ashtanga Yoga.
Respiración Ujjayi (respiración victoriosa): Es el centro de la práctica. Facilita el movimiento en el cuerpo físico, calma la mente de enredos innecesarios. Distribuye la energía necesaria por todo el cuerpo y unifica el cuerpo físico, mental y energético; como una sola entidad de movimiento, transformación y poder. Genera calor purificador en el cuerpo.
Bandha (válvulas o candados): Moolabandha, Uddiyanabandha y Jalandarabandha ayudan a integrar tu cuerpo físico y energético. Con el uso de los tres bandhas en tu práctica, tu cuerpo se unifica y crea fluidez y gracia. Acumulan la generación del calor purificador en tu cuerpo, y es un punto fuerte de enfoque interior para que tu mente descanse.
Dristi (Enfoque): Los ojos ayudan a que la mente se enfoque, aportando a una práctica más interna y potencialemnte meditativa. Ayuda a mantener tu mente y sentidos en los parámetros de tu cuerpo fisico.
Hay dos tipos de clases en la práctica de Ashtanga Yoga, clase Guiada y clase Mysore.
Las clases Guiadas las hay en distintos niveles, desde los niveles básicos a los más avanzados; siguiendo el conteo tradicional de la secuencia, marcando la respiración y el movimiento.
Mysore es la forma más personal de aprender Ashtanga Yoga.
No necesitas ser un practicante avanzado de Ashtanga Yoga para practicar estilo Mysore. Realmente Mysore es la forma tradicional de aprender y de empezar tu práctica de yoga.
En este estilo aprendes a tomar responsabilidad por tu propia práctica y desarrollas una relación de confianza con tu maestro. Es la única manera de aprender los asanas (posturas) más avanzadas de manera segura, con la habilidad y dedicación adecuada. Cuando la persona se compromete a un método, a un estilo de yoga y mantiene una práctica constante, abre las puertas a niveles más profundos en cuerpo, mente y espíritu.
Para los nuevos practicantes el estilo Mysore requiere un compromiso de práctica mínima de tres veces por semana el primes mes; y para sentir los beneficios de la práctica tomando clases guiadas (no estilo Mysore) mínimo 2 a 3 veces por semana para empezar es lo recomendable. En el caso de las clases guiadas si desean ir a clases sueltas 1 vez por semana es posible, pero hay que tener siempre en cuenta que la constancia es lo que trae los beneficios.
Para quienes se sienten intimidados con el estilo Mysore, son bienvenidos a observar la clase Mysore primero o también puedes tomar las clases introductorias estilo Mysore, antes de empezar tu práctica de Mysore.
Para quienes quieren saber más…
El corazón del yoga
Técnicamente todos los yogas siguen ocho peldaños, descritos por Patanjali:
Yama (diciplina ética)
Niyama (Observación y purificación)
Asana (posturas)
Pranayama (control de la respiración)
Dharana (concentración)
Dhyana (meditación)
Samadhi (conciencia en sí)
Los ocho peldaños se apoyan entre ellas y deben ser aprendidos y practicadas diariamente. La práctica dedicada de asanas prepara al yogi a los peldaños más sutiles como Pranayama que son claves para encarnar Yamas y Niyamas. El corazón del yoga es una forma de vivir ética, honesta y compasiva.
La práctica de Ashtanga Vinyasa Yoga es una secuencia de posturas que varían en dificultad y beneficios.
El fluir entre cada postura es la parte integral de la práctica. Actualmente la práctica esta dividida en 6 series, están están separadas 3 grupos:
La Primera Serie – Yoga Chikitsa limpia el cuerpo físico. La Serie Intermedia – Nadi Sodhana purifica el sistema nervioso, abriéndonos a experiencias más sutiles de nuestras energías y mente. La Serie Avanzada – A,B,C y D, Sthira Bhaga, que cultiva la fuerza y la gracia, explora más la flexibilidad, vigor y tranquilidad como una sinergia integrada; requiere grandes niveles de humildad y dedicación. Cada serie de posturas debe ser completada para proceder a la siguiente. El proceso de aprendizaje de Ashtanga deja que el practicante desarrolle la concentración, fuerza, flexibilidad y soporte necesario para progresar de manera segura, óptima y balanceada.
En Ashtanga la respiración está siempre sincronizada con el movimiento. Como resultado abrimos nuestro corazón y aclaramos nuestra mente.